PROFESOR Y APODERADO

-Prefiero marcarle la cara, yo que Io quiero, que verlo sufrir por desconocer algo -contestó Baloo-. Le enseñé la Palabras Mágicas de la Selva; lo protegerán de los pájaros enemigos, las serpientes, de todo cazador, excepto los de su manada.
-Pero ten cuidado, porque puedes matarlo. No lo confundas con un tronco y afiles en él tus garras. Dime qué palabras son esas. Seré quien preste ayuda en vez de pedirla…
-Que te las diga si tiene humor ahora: ¡Ven acá, pequeño! continua...
Rudyard Kipling
Fuente: Colección Amiguitos
Fuente: Colección Amiguitos
