EL PERRO Y LA LIEBRE
Un perro de caza atropó un día a una liebre, y a ratos la mordía y a ratos le lamía el hocico. Cansada la liebre de esa cambiante actitud dijo:
- “Deja ya de morderme o de besarme, para saber yo si eres mi amigo o si eres mi enemigo”
MORALEJA: No deja vivir tranquilo la terca incertidumbre
VALOR ALENTADO: La decisión.
FUENTE: Fábulas ejemplares de Esopo.
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