09/11/2010

TIRAR LA BANDA POR EL BALCÓN - RESUMEN - TRADICIONES DE RICARDO PALMA

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TIRAR LA BANDA POR EL BALCÓN
Desde la caída de La Mar, -después de la batalla de Portete - Gamarra inició una era de revoluciones y motines que, raro fue el año sin tres o cuatro presidentes en Lima.
Disputábanse la presidencia los generales Vivanco y Castilla, y Lima acataba la autoridad del primero, en la persona de Manuel Menéndez; que no era militar, sino un acaudalado agricultor, presidente del Consejo de Estado.
Fastidiose un día Menéndez y cedió el poder al vicepresidente del Consejo, Justo Figuerola; quien gobernó del 15 de marzo de 1843 al 8 de abril en que llegó Vivanco.
Y cuando este tuvo que abrir campaña contra Castilla, volvió
Menéndez a ejercer la suprema autoridad; pero el 10 de agosto de 1844, después de una rabieta, encaminose a casa de Figuerola buscando que lo sustituyera.
Vivía Figuerola en Plateros de San Agustín, colindante con la dulcería Broggi. El 11 de agosto, a eso de las seis de la tarde, se presentó una poblada dando gritos subversivos y amenazando con echar abajo la puerta de la casa.
Informado por su portero de lo que ocurría, Figuerola llamó a su hija política y le dijo:
- Catalina saca la banda que está en la cómoda, abre la celosía del balcón y dile al pueblo soberano que disponga de ella a su regalado gusto. Y también, que digo yo que me dejen tranquilo, y que se vayan al mon... tón.
La turba, en procesión de la banda, se retiró vitoreando al señor Fiquerola y se echó a buscar a quién ceñírsela. Los notables de la ciudad impusieron a que, nuevamente, Menéndez asumiera el mando; quien, el 5 de octubre, le entregaría a Ramón Castilla - investido con el carácter de provisorio - la asendereada banda.
Fuente: Tradiciones De Ricardo Palma.

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